La lectura es una habilidad humana muy compleja y más importante de lo que se cree, y hoy por hoy no recibe la atención que amerita, la mayoría de las personas prefieren navegan en Internet y ver vídeos en lugar de leer, y cuando les toca, tienen problemas para entender el texto o tardan mucho en hacerlo. Por eso, te explicaremos como leer más rápido.
Cuando navegamos en Internet no estamos aprendiendo de la misma manera que cuando leemos. La lectura no tiene por qué ser un proceso lento, cuando lees rápido, puedes absorber más información que la persona promedio.
El lector adulto promedio pasa aproximadamente 5,5 horas leyendo un libro de 100.000 palabras, un lector rápido puede completar la misma tarea en unos 50 minutos. Esto abre posibilidades significativas para que los lectores rápidos tomen un libro todos los días con un compromiso de menos de una hora.
Técnicas para leer más rápido
La lectura rápida requiere algo de práctica, pero puedes comenzar a cosechar los beneficios de este método de lectura. Ahora bien, estas son las técnicas que te ayudaran a acelerar tu lectura.
1. El índice debe ser lo primero que leas
Nos saltamos la tabla de contenido con demasiada frecuencia cuando comenzamos a leer un libro, especialmente si tenemos la intención de leer el libro en su totalidad, esto es un error, no emprenderías un viaje por carretera sin consultar un mapa. El índice es una hoja de ruta del lector a lo largo del libro.
Dado a que los lectores rápidos no están obsesionados con aprender cada palabra, conocer las grandes ideas de cada capítulo prepara el cerebro para captar la información más importante del texto.
Si necesita conocer información específica del libro, el índice de contenido te indicara cuales son los capítulos más relevantes.
2. Lee siempre con intención
Siempre te debes preguntar: “¿Qué está tratando de decir el autor?” es una manera de preparar tus pensamientos, tu cerebro trabajará para encontrar la respuesta a esta pregunta mientras lees.
3. Identifica el punto de vista del autor
Los libros generalmente contienen referencias a otros trabajos académicos para apoyar su punto de vista. Si echas un vistazo a lo que el autor elige citar, puedes aprender un poco más sobre cómo formulará sus puntos clave. Esta información puede guiar su pensamiento mientras lee rápidamente.
4. Nunca leas en voz alta
Leer en voz alta es excelente para desarrollar la fluidez de palabras en los lectores, pero es una forma segura de reducir la velocidad de la lectura. Cuando leemos pasajes en voz alta, nuestro cerebro tiene que trabajar un poco más que cuando leemos en silencio.
La principal diferencia entre la lectura en silencio y la lectura en voz alta es que el hecho de hablar requiere que tu cerebro ejerza un proceso adicional.Es difícil aprender todas estas técnicas al principio, pero con algo de practica de puede lograr. ¡Animo!
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